Las estadísticas dicen que cada uno de nosotros se enamorara tres veces en promedio, algunos se enamorar más veces y otros menos, pero el promedio es tres.
Yo llevo una, ¿tu cuantas llevas?
Hasta que una mañana la lánguida anémica bajó al jardín, sola, y siempre con su vaga atonía melancólica, a la hora en que el alba ríe.
Vio un lirio que erguía al azul la pureza de su cáliz blanco, y estiró la mano para cogerlo. No bien había tocado el cáliz de la flor, cuando de él surgió de súbito una hada, en su carro áureo y diminuto, vestida de hilos brillantísimos e impalpables, con su aderezo de rocío, su diadema de perlas y su varita de plata.
...Berta corrió a su retrete a vestir sus más ricos brocados...Berta se vio en el carro del hada, le preguntó: -¿Y adónde me llevas -Al palacio del sol- el hada respondio
Fin
Agradecimientos a: Elena Mejia por prestarse para este proyecto y no renegar mas que de usar accesorios, y a Daniela Colin por facilitar las locaciones y hacernos mas sencilla toda la labor.